Sunday, October 22, 2006

Cantar de Juan, El Caminante (La propuesta del Rey)

"Soy un guerrero que viene desde tierras muy lejanas respondiendo al llamado de una princesa solitaria que vive en esta isla. No diré nada más sino en su presencia. Abrid la puerta o la asaltaré y juro por la espada que cargo que nada habrá que me impida llegar donde ella".

Le contaron al Rey la decisión del forastero y éste mandó a llamar a sus hijas y les inquirió si alguna conocía al guerrero que solicitaba entrar. Todas dijeron que no. "¿Estaís seguras?, ¡mirádlo bien!", insistió el buen hombre. "Yo lo he visto en sueños y en sueños le he pedido ayuda", dijo la menor de todas.

"En sueños", repitió el Rey y en eso pensaba cuando le avisaron que una nueva flota de enemigos se divisaba al poniente. Ordeno preparar las cada ve más débiles defensas y luego que hicieran pasar al forastero.

Juan, El Caminante reconoció de inmediato a su princesa y ella a él. Fue como si se abrazaran con la mirada, sus amplias sonrisas parecían querer alcanzarse y todo el salón se lleno de tanta vida que no parecía que allá afuera se preparaba una nueva batalla.

"Eres tú a quien vi en mis sueños. He cruzado medio mundo solo para encontrarte, siguiendo solo aquel rastro de migajas de pan y aquella madeja invisible para cualquier otro. Estoy aquí ahora y nada hará que me separe de tí", exclamó el recién llegado.

"Ella es mi hija y este es mi reino. Ayúdame a librar esta batalla, derrota a mis enemigos, y podrás tomar a mi hija que parece dispuesta a tí", dijo el Rey.

1 Comments:

Blogger Laura Martillo said...

Oh! Se le puso difícil a Juanito Walker!

Al menos logró conocer a su princesa y saber que era de carne y hueso, no?

5:13 PM  

Post a Comment

<< Home